Tampoco seas orgulloso, eso no lleva a ningún lado; aunque no hemos de confundir orgullo con autoestima.
Cuando ese pilar básico en tu vida se caiga, te preguntarás: ¿Y qué hago yo ahora? ¿Y todo lo que hemos vivido dónde queda? Conozco esa sensación y os aseguro que se pasa. Duele, pero se pasa.
Muchos no estamos acostumbrados a estar solos con nosotros mismos, a tumbarnos y a decir: "voy a hacer esto o lo otro". No podemos convivir con nuestro "yo" y entonces llegan las "rayadas".
Pero hemos de aprender que ninguna relación es para siempre excepto esta última. Ni las amistades, ni los amores, ni siquiera las relaciones familiares se sustentan al cabo del tiempo. La realidad duele, pero somos humanos y egoístas e intransigentes.
Pues bien, da una segunda oportunidad, y una tercera, y una cuarta... No es el hecho de dar muchas oportunidades en lo que reside el error sino en darle una segunda a aquella persona que no se lo merece. Por quien estés dispuesto a luchar, darás la vida y eso es así.
Escribe en tu pared los planes para este verano, haz un separador de libros en el que haya una foto de ese lugar mágico al que quieras visitar y ten siempre a mano un papel en el que ponga:
"Eres fuerte y lo sabes; así que si has llegado hasta aquí no es hora de rendirse, sino de levantarse y luchar."

me encanta como escribes sigue asi y llegaras muy lejos
ResponderEliminardesde luego que con tu forma de redactar muestras que eres una persona muy luchadora y fuerte
me encanta como eres
te leo cada vez que pones algo nuevo
señorita xxxx..
Muchísimas gracias!!!
EliminarAgradezco mucho todos los comentarios, las visitas y las enhorabuenas. Me encanta que os pueda ayudar un poco auqnue sea para desahogaros. Un beso.
Todas las personas tienen luces y grietas. Las grietas no sin sinónimo de oscuridad, sino de secretos y recuerdos de historias pasadas.
ResponderEliminarSal de tus propias grietas para disfrutar de tu propia luz.